Aguinis: Uno descansa de un trabajo haciendo otro!

Entre la infinidad de las opciones y la dictadura de poder elegir sólo una cosa

Acabo de leer un artículo en la revista La Nación (6 Junio 2004) sobre la vida de Marcos Aguinis y quiero transcribir aquí, para recordarlo en el futuro, dos partes que me parecieron interesantes.

La primera tiene que ver con nuestras decisiones de vida, carrera, y los consecuentes renunciamientos que se producen al optar por un camino determinado.
…Decía Truman Capote que cuando Dios (o la Naturaleza, agregaría yo) da un don, da un látigo. Un látigo para exigirse y no perdonarse desmayos. Una responsabilidad frente a los regalos de Dios. El problema es que Aguinis tenía muchos dones, había recibido muchos regalos, tenía muchos látigos y se autoinfligía muchos latigazos. Dibujante, pianista, médico, neurocirujano y novelista. Una de las formas del infierno podría haber sido ésta: te condeno a triunfar en cada disciplina humana que abordes; te condeno, así, a vivir entre la infinidad de las opciones y la dictadura de poder elegir sólo una cosa…

La segunda es acerca de su explicación ante los constantes cambios de actividades. Uno descansa de un trabajo haciendo otro.!!